Libros del crepúsculo

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domingo, 18 de julio de 2010

Félix de Azúa sobre Walter Benjamin

Si no fuera porque mi prosa no llega a la suya, suscribiría, desde la primera mayúscula hasta el punto final, el artículo “Cada vez más crecidos” de Félix de Azúa en El País de ayer. Asegura este escritor catalán que Walter Benjamin (1892-1940) es el pensador más referido e interpelado por la filosofía contemporánea. “Fue el último en llegar –dice- pero tiene todo el aspecto de ser el que va a quedarse durante más años”.
Mientras otros filósofos e intelectuales del siglo XX se vuelven cada día más ajenos a lo que anuncia ser este siglo XXI, Walter Benjamin parece vivir y pensar entre nosotros: “desde el puerto del siglo XX los viejos filósofos nos despiden agitando los pañuelos. La nave del siglo XXI se aleja lentamente y sobre la cubierta nosotros, supervivientes efímeros, contemplamos el muelle. Vemos cómo van mermando las figuras y buscamos con la mirada a Sartre, a Russell, a Luckacs, a Scheler, a Dilthey, a Husserl”.
Los temas de Benjamin -tiempo, tecnología, guerra, ciudad, violencia, duelo, exilio, juventud, vejez, suicidio, lengua, traducción, cultura material, arte popular, juguetes, relojes, maletas, fin de la metafísica, literatura, pintura, música, religión, mar, academia, bibliofilia, drogas, sexo, símbolos, totalitarismo, terror, democracia...- son los nuestros.   
Sólo en un comentario lateral no coincido con Azúa. Cuando dice: “si Benjamin viviera en la actualidad, antes tomaría la senda de Zizek y sus análisis sobre las series televisivas que la de Eagleton y su episcopal excomunión de las masas”. Además de exagerado, este juicio sobre el autor de Terror santo (2008), basado en un artículo sobre el pasado Mundial de Fútbol en Sudáfrica, desdeña que la crítica de la violencia del británico –de la violencia comunista del siglo XX y de la violencia terrorista del XXI- está más cerca de Benjamin que las ponderaciones del legado de Lenin y Stalin sugeridas por Zizek.

1 comentario:

  1. Tal pareciera que Azua no estuviese enterado que Benjamin es autor - no salemente de escritos sobrer "juguetes y ninez" como dice en su articulo - de la "Critica de la Violencia". Uno tiene la impresion al leer el texto de Azua que hay una ansiedad en desligar a Benjamin del marxismo (de hecho la palabra "marxistoide" aparece en el texto). De ahi que Azua solamente cite las Tesis de la Historia, donde nos dice que este se distancia de Adorno.
    Otra contradiccion de Azua es aproximar a Benjamin con Zizek y nada menos que a traves del futbol. Da la casualidad que en una entrevista durante el Mundial, Zizek tambien tomo la posicion de Eagleton en torno al futbol como opio y espectaculo nacionalista de las masas. Estaria por verse ademas, ya esto seria un debate, si en realidad Benjamin es tan "pro" cultura pop como algunos criticos quieren ver. Yo no estoy muy seguro.

    un saludo Rafael,

    G

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