Montenegro, hijo de gallego y cubana y autor de la clásica novela Hombres sin mujer (1938), fue uno de los redactores de la revista comunista Mediodía. Esta publicación, como muchas de las editadas por comunistas en América Latina, se involucró en el bando republicano de la Guerra Civil.
Montenegro escribió para Mediodía varios artículos antifranquistas y en 1937 apareció su folleto Aviones sobre España. Relato de la guerra en España –también incluido en este volumen-, que le valió el interés del movimiento de solidaridad con la República. En ese mismo año, Montenegro viajó a Nueva York, donde colaboró con los editores republicanos de La Voz y desde ese puerto se embarcó a la península, donde se uniría a las tropas comandadas por el coronel Valentín González.
Siempre que se piensa en cubanos en la Guerra Civil, el primer nombre que viene a la mente es el de Pablo de la Torriente Brau, nacido, por cierto, en San Juan, Puerto Rico, y muerto en combate en Majadahonda, defendiendo Madrid de la ofensiva nacionalista. No por menos conocida, la participación de Montenegro en aquel conflicto, narrado en Tres meses con las fuerzas de choque, deja de ser valiosa.
Uno de los capítulos del libro de Montenegro, el titulado “Cubanos”, habla precisamente de soldados negros de la isla, incorporados a las Brigadas Internacionales que apoyaron a la República. Uno de esos soldados, Cueria o Aquilino, pudo haber sido el que aparece en la foto, cuya imagen fue erróneamente atribuida a un combatiente afroamericano, del batallón "Abraham Lincoln".
“Aquel mismo día me llevó a ver a Candón (Policarpo Candón, brigadista gaditano-habanero que murió en los combates de Altos de Celada) que estaba enfermo de la vista. Por las luces veladas, apenas pude entrever a aquel hombre al lado del cual habría de vivir las emociones más intensas de la guerra. Por el momento no le di mayor importancia. No hablaba de la guerra sino de Cuba, pero sencillamente, popularmente: del barrio donde se había criado, en La Habana; de los negros que él quería y admiraba, pero no desde afuera, como un motivo folklórico, sino desde un plano humano. No obstante en sus palabras no parecía haber un contenido político sino más bien de regocijada simpatía. Me habló, ese primer día, más de Aquilino que de Cueria: dos negros que han nacido en Cuba y que ahora están en Madrid. Uno, Cueria, como he dicho, capitán de ametralladora de Candón, el más distinguido, terriblemente efectivo en su arma, lleno de inventiva, de “trucos”. (De madrugada se levanta y en lugar avanzado del frente, simula el emplazamiento de una ametralladora: unas ramas, un latón negro y unas tablas húmedas en las que prende un fuego ahogado. Después, en ángulo emplaza las ametralladoras efectivas; cuando rompe el alba, hace fuego breve y espera; los fascistas se preparan. Ven el emplazamiento simulado y descubren algo para Cueria, que los tiene cogidos de flanco. Así ha matado a muchos). Si en España se condecorase la eficacia y el valor, el pecho de Cueria estaría cubierto de medallas. Aquilino es saxofonista y trabaja en un teatro de Madrid. Candón se ríe al hablar de Aquilino. Este dice:
- Soy un antifascista, pero no hombre de guerra.
Un día Candón lo invitó a ir al cuartel “Pablo de la Torriente Brau”, a darle una función a los soldados. Candón le había dicho:
-Después te daremos una función a ti.
Aquilino tocó el saxofón como sólo él sabe hacerlo. Primero asuntos cubanos; después, caracterizado de baturro, de andaluz, de gitano. Terminó vestido de torero –pues también es estrella del ruedo- con un motivo taurino en el que acosaba a un toro imaginario, que mugía en el saxofón donde también mugía el público”.
Muy bueno. Gracias.
ResponderEliminarBravo Rojas, ojalá y en una Cuba democrática estas cosas se conozcan. Por mi parte ya tengo la misión de hacer extensivo este escrito a todos los amigos y amigas de mi Cuba. Zacarías Monterrey.
ResponderEliminarFascinante la entrada. Luego le explicamos por que pensamos que el de la foto no es ni Basilio ni Aquilino. Del primero tenemos fotos; el segundo, segun entendemos, no salio de NY y el atuendo del retratado es uniforme de doughboy de la primera guerra mundial, uniforme que llevaron de NY lis primeros voluntarios.
ResponderEliminarRafael: no me di cuenta de que el blog es tuyo al colgar mi comentario. Si quieres saber mas de esta historia archivística y detectivesca, déjame saber.
ResponderEliminarJf2@nyu.edu. Saludos.
Hola, James, gracias por tus comentarios. Dices que Aquilino no salió de Nueva York pero según el testimonio de Candón, que rescató Montenegro, estaba en Madrid e iba al frente a tocar el saxofón a las tropas. Te escribo a tu e-mail. Saludos, Rafael.
ResponderEliminarVamos a investigar un poco más lo de Aquilino Conejo. Creemos saber que la foto en cuestión fue tomada en Barcelona el 17 de enero de 1937, cuando un grupo de voluntarios pasaba por la ciudad, procedentes de NY, camino a Albacete. Este grupo en particular había salido de NY el día 6 de enero, en el SS Champlain. Tenemos una lista (que, obviamente, podría ser incompleta) de los pasajeros del barco, y no figura Aquilino. Sabemos que muchos iban equipados con uniformes comprados en Army Navy Surplus Stores de BT, de tipo "doughboy" de la primera guerra mundial. Grupos posteriores, que sepamos, no llevaron uniformes, ya porque supieron que eran poco prácticos, ya porque no querían que su equipaje delatara la finalidad de su viaje. (EN la aduana francesa, decían que iban a hacer turismo, a visitar la exposición universal, etc. ¿a cuento de qué van a tener un uniforme militar en la maleta??!!!)
ResponderEliminarCreemos que Aquilino estaba ya instalado en Madrid antes de enero de 1937; creo haber leído, incluso, (aunque no estoy muy seguro, tendría que volver a mis notas) que ya a finales del 36, ya tocaba en el grupo de Julio Cuevas, otro músico cubano que se encontraba en España al estallar la guerra... ¡qué historias, no! Y luego, resulta que dos hermanos de ELiseo Grenet también estaban en Madrid al comienzo de la guerra y también acabaron entre las brigadas internacionales!! Y creemos que el apodo "Cuba Hermosa" proviene de la letra del estribillo del "Lamento cubano" de Grenet, que, por cierto, durante los años de la guerra, regenta un "night club" en NY llamado Club Yumurí.
Si la información que tenemos es fidedigna, me parece posible pero poco probable la idea de que Aquilino Conejo se haya desplazado de Madrid a Barcelona ese día de enero, y que se haya puesto un uniforme (¿cómo lo consiguió?) con toda probabilidad comprado en NY, para salir en una foto de recién llegados. En fin, seguimos en el archivo. Espero tu e-mail
Abrazos,
Jim
Foto de Carlos Montenegro
ResponderEliminarhttp://www.latinamericanstudies.org/montenegro.htm
interesante comentario, volveré para saber mâs sobre este tema. Gracias. Lourdes
ResponderEliminarInteresante tema; volveré para saber mâs sobre él. Saludos cordiales. Lourdes
ResponderEliminargracias a quienes relacionan cubanos en la guerra contra el fascismo. hace muchos anos. ahora cuba hace so Anos tiene en el podder el facista espanol masgrande los hispanos. los hermanos castros.. hemos participado el las gueras de africa y de america latina miles de compatriotas han muertos.por el capricho de un tirano.y en lo mas resiente losjusilamientos de centerares de cubanos por no simpatizar co .el regimen
ResponderEliminarEs curioso que cuando se habla de guerras o genocidios.nunca se incloyen a los negros.cuando hemos sidos los mas sacrificados,expoliados,ultrajados desde los arbores de la creacion.esta es alguna de las`paginas de la historia que muchos españoles deberian saber.que gracias a nosotros y muchos luchadores x la (democracia)tengan hoy libertad,y dejad de mirarnos como bichos raros.
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